El Timbaler de Bruc         
   

     
 
                                                Cuenta la historia que 6 de junio de 1808, las tropas napoleónicas, salen de Barcelona y se dirigen a Lérida y Zaragoza al mando de un oficial mediocre llamado Schwartz . Tienen orden de dirigiéndose por Molins de Rei y ocupar todas las ciudades que haya a su paso, y sobre todo la de castigar las ciudades barcelonesas, de Manresa e Igualada, que son zonas estratégicas. De momento avanzan sin resistencia, pero a la altura de El Bruc, a las faldas de las montañas de Montserrat, son atacados por las guerrillas catalanas, compuestas de soldados y “palleses” (agricultores en catalan) motivadas por el espíritu del levantamiento del dos de mayo.
         Schwartz intentó formar un gran cuadro con todas las tropas que pudo juntar y contraatacar a los catalanes, pero dicen que el sonido de los tambores que resonaban por todo el valle haciendo ecos en las montañas le hicieron pensar que tropas regulares acudían al combate, así que decidió retirarse lo mejor que pudo.
           No se sabe a ciencia cierta si fue el ruido del tambor o el de las campanas de los pueblos tocando a rebato, o las dos cosas a la vez lo que más miedo causó en los franceses, lo cierto es que los somatenes de Sampedor traían un tamborcillo de 14 años llamado Isidro Llusá, junto con otro de Igualada llamado Benito Malvehí, así como un vecino de Piera, Miguel Rigol, que había sido trompeta de caballería, y que estuvieron tocando durante casi toda la acción, animando a los suyos, aunque se cuenta que a Isidro Llusá lo capturaron los gabachos y le quitaron el tambor, aunque después escapó.
           El resultado de la emboscada estratègica del dia 6 de junio fue la retirada de la columna francesa, com 300 soldados muertos , cuando se batian en retirada. Al principio las tropas de Schwartz se retiraron con cierto orden, perseguido de cerca por los somatenes, pero al llegar a Esparraguera encontró el camino cortado y a los lugareños atrincherados, así que tuvo que dividirse campo a través, y perdio uno de sus cañones al undirse el puente de Abrera y se desordenó aun mas según caía la noche, regresando a Barcelona en la madrugada del día 7 en estado lastimoso. Esta fue la 1ª acción del Bruch, luego hubo una segunda cuando Duhesme juntó más tropas, y lo intentó con una división entera (de Lechi), pero otra vez se encontró con la resistencia de los valerosos somatenes y de los guardias valones y los suizos, que para esta ocasión cambiaron sus uniformes por trajes de payés con barretina y todo y además habían recibido algún viejo cañón, que junto con el capturado a Schwartz en la anterior ocasión colocaron muy bien cerrando el paso a las columnas francesas.
           Duhesme también se echó atrás esta segunda ocasión y esto sirvió para que toda Cataluña se levantara en armas enardecida por estas dos acciones victoriosas. Luego se irían los franceses hasta la frontera y llegaría Napoeon “in person” con su vieja guardia y 150.000 hombres más y cambiaría un poco las cosas, pero mientras su moral estaba ya minada, la reistencia se iba.
Actual mente hay levantados en la zona varios monumentos al Timbaler, por su gran valentía, y según la leyenda un muchacho pudo por su audacia vencer la moral de todo un ejercito francés. Un hecho que cambio el curso de la historia.